Del viernes 19 al domingo 28 de abril de 2024
Un paseo por los escenarios de novela de María Dueñas
La escritora abre la 42ª edición de este encuentro con la literatura con un pregón en el que recorre los lugares en los que se desarrollan sus tres obras
Tetuán, San Francisco, México, La Habana y Jerez. Cinco lugares distantes y diferentes unidos por la literatura de María Dueñas, retratados en sus novelas y recuperados de un pasado esplendoroso. La escritora inauguró ayer la 42ª edición de la Feria del Libro con un pregón en el que hizo un recorrido por estos escenarios que se convierten en un personaje más de sus obras, desde El tiempo entre costuras y Misión Olvido hasta su última publicación, La templanza.
Dueñas inició su intervención recordando la importancia que para ella tiene Córdoba ya que aquí se conocieron sus padres y durante su infancia vino en varias ocasiones. "Córdoba es, por tanto, una parte fundamental de mi biografía, de mi razón de existir", señaló la autora, y se refirió a la vieja casa de sus abuelos, que ya no existe, en la calle Pretorio; la de sus tíos en El Brillante, sus visitas a los jardines de Colón, a Galerías Preciados y a la Sociedad de Plateros, donde su abuelo la invitaba a calamares.
Por estos motivos, Córdoba es "un escenario insustituible en la novela de mi vida" y "en homenaje" a ella dedicó su pregón a "escenarios literarios, territorios y ciudades sobre los que se han fraguado ficciones que han llenado páginas, volúmenes, bibliotecas y librerías". Así, tras nombrar fugazmente al París de Balzac, el Londres de Dickens, la Lisboa de Pessoa, la Lima de Vargas Llosa y Bryce Echenique o la Barcelona de Eduardo Mendoza; Dueñas echó "la vista nueve años atrás" y se imaginó "pateando las calles de la hermosa Tetuán, la antigua capital del Protectorado de España en Marruecos, tan vinculada a mi propia familia". "Me veo imaginando El tiempo entre costuras antes de escribir siquiera una línea", apuntó la escritora, que fue recibida con mucha expectación en la caseta del Bulevar del Libro, llena a rebosar. [...]
[noticia publicada en el Día de Córdoba 19/04/2015]