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Ana Belén Ramos llama al cuidado del planeta en la novela infantil 'Koko'

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La escritora, que acaba de publicar la obra, ofrecerá un taller en la feria el próximo sábado.

a-b-ramos-cuidadoAna Belén Ramos impartirá el próximo sábado en la feria (18:00) un taller infantil de escritura y ecología centrado en Koko. Una fantasía ecológica (Gran Travesía), una novela que acaba de publicar y que está protagonizada por una niña con cola que vive ajena a la transformación sufrida por el mundo después de la Gran-Gran Crisis. Cuando un día pierde su cola, Koko se lanza a buscarla y descubre que la naturaleza casi ya no existe y que el hombre ha perdido la conexión con sus sueños.

"La historia tiene muchos componentes de mi propia vida -explica la escritora-. Es algo que he ido elaborando a lo largo del tiempo. Las primeras líneas las escribí en 2003, pero el inicio está en mi infancia, en la que tuve la suerte de disfrutar mucho tiempo de la naturaleza con mi familia, y en sucesos como la muerte de mi abuelo Manuel cuando yo era adolescente. La noche en que murió tuve un sueño relacionado con la muerte que está en el germen de Koko. De hecho, ese sueño aparece con muy pocas variaciones en uno de los capítulos finales".

Ramos traslada a los lectores el mensaje de que "es importante que cuidemos el planeta" y hace "una llamada de atención a la manera en que vivimos en esta sociedad tan industrializada". Y apunta "la necesidad de volcarnos hacia los demás, hacia el cariño, cuando todo va tan desastrosamente mal". "Es necesario mirar hacia otro lado que no sea el dinero y recuperar lo que es esencial para el ser humano", indica.

Para escribir este tipo de obras "hay que tener imaginación y hacerlo con alegría: no poner cortapisas y trabajar mucho", apunta Ramos, que coordina la sección infantil de esta edición de la Feria del Libro.

En el taller del sábado la escritora, nacida en Córdoba en 1979, hablará a los niños, de entre 9 y 11 años, "de lo que significan los sueños: Koko dice que un sueño pequeño puede servir a una persona, pero un gran sueño puede servir a todo el planeta. Y los sueños se pueden sembrar con palabras".

 

Opinión. José Luis Casas Sánchez: Los libros

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Tal y como se presenta el panorama político, hay que buscar escapes que nos permitan olvidar las limitaciones de unos, la sinrazón de otros y la desvergüenza de muchos, aunque estos últimos pertenezcan al grupo que decía representar una nueva forma de hacer política, pero nos han convencido de que la vieja política no era tan mala como decían, sobre todo porque han utilizado las formas de cuanto ya considerábamos superado, al menos desde los tiempos de aquello que se denominó Eurocomunismo. Los ciudadanos, en esa huida consciente de la realidad, hemos podido acogernos al fútbol, bien en las eliminatorias de la copa de Europa (prefiero esta terminología a la de Champions ) o bien en la evolución de los equipos que encabezan la Liga. Pero quienes no sean seguidores de ese deporte ahora contarán con otra oportunidad aún mejor, la que nos brinda la Feria del Libro y todo el conjunto de actos anexos a ella, en definitiva, el acercamiento al mundo del libro, donde siempre podremos encontrar lo que necesitemos. En mi caso, tengo la suerte de compaginar ambas cosas, el fútbol y los libros, si bien estos últimos me han dado, y me dan, muchas más satisfacciones que el primero.

Siempre he sido consciente de lo que significan los libros, pero hasta hace unos años no me di cuenta de lo que pueden representar en tu vida. Entonces comprendí la profundidad de aquellos versos uno de mis autores favoritos, Borges, quien decía en uno de sus poemas: "Mis libros (que no saben que yo existo)/ Son tan parte de mí como este rostro/ De sienes grises y de grises ojos/ Que vanamente busco en los cristales/ Y que recorro con la mano cóncava". Todo ocurrió cuando, debido a una mudanza, todas mis pertenencias estuvieron varios meses en un guardamuebles. Dejé a mano lo imprescindible, inclusive algunos libros, hasta que llegó el día en que pude recuperarlo todo. Comencé a abrir cajas, una tras otra, y me encontraba conmigo mismo en cada objeto, que por supuesto conservaba en mi recuerdo. Sin embargo, cuando aparecieron mis libros, a partir del momento en que volvieron a sus anaqueles, desde que pude volver a leer los títulos y acariciarlos uno por uno, solo entonces, experimenté emoción, la misma que se siente ante cualquier otro reencuentro, como la que se vive cuando después de un tiempo vuelves a ver personas queridas. Y en efecto, como decía Borges, ellos no sabían de mi existencia, pero mi vida se ha construido, en parte, gracias a lo que representan, a lo que me han enseñado, a cuanto he vivido a través de sus páginas. Me detuve en especial con algunos ejemplares a los que guardo inmenso cariño, no tienen valor bibliográfico, pero en sus páginas han quedado escondidos sentimientos que se pierden entre las líneas del texto escrito, y eso sin contar las hojas secas, los pétalos de flor, los comentarios al margen o los sencillos subrayados que me traen a la memoria reflexiones y experiencias pasadas.

Esta vivencia no la tendría quien se jacte de tener en un dispositivo electrónico más ejemplares de los que yo poseo. En su ignorancia, pensaría que todo reside en una cuestión de cantidad, y no es así, el número de libros que se posean es algo sobrevenido, lo que importa es la valoración que hagamos de ellos como objeto, que poseamos la sensibilidad suficiente como para sentir placer al ver una edición cuidada o al pasar la mano por una encuadernación adecuada. Algo que podrán valorar quienes lleguen a poseer uno de los cuatrocientos ejemplares que la Diputación de Córdoba va a editar de la Historia General del Perú del Inca Garcilaso, en una edición facsímil al cuidado del gran bibliófilo montillano Manuel Ruiz Luque, a partir de un original de la Fundación que acoge su Biblioteca, la cual, en el sentido utilizado por Borges, es infinita.

[publicado en diario CÓRDOBA 20/4/2016]

 

La balada de García Montero se entona en la Feria del Libro

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El poeta granadino presenta esta tarde en el Bulevar de las Letras su último poemario, Balada en la muerte de la poesía.

garcia-montero-2¿Cuánto tarda en llegar una noticia hasta el siglo XV? El poeta se lo pregunta al enterarse por la televisión de que la poesía ha muerto. Piensa en Jorge Manrique. ¿A qué hora será el entierro? Poco a poco el buzón del teléfono se llena de mensajes: la vida retirada, la noche oscura, Lucrecio, Leopardi, Baudelaire, Rubén Darío, Anna Ajmátova, Federico García Lorca, el amor constante más allá de la muerte... Todos quieren saber, todos comentan el suceso. El poeta asiste al día siguiente al entierro, regresa a su casa y se sienta a escribir su nuevo poemario.

Luis García Montero presenta esta tarde en la Feria del Libro (a las 20h. y acompañado del poeta Pablo García Casado y el catedrático de Lengua y Literatura Pedro Roso) Balada en la muerte de la poesía (Visor). Un título "que es una provocación", según declaraciones del poeta a Radio Córdoba, en estos "malos tiempos para la lírica".

El escritor granadino, que escribe versos desde hace 36 años, está convencido de que si se produjera la muerte de la poesía "acabaríamos llorando todos", incluso los que no la leen, porque "desaparecería" nuestra memoria y nuestra relación con el pasado. "¿Qué sería de Granada sin Lorca o de Córdoba sin Pablo García Baena o Góngora?", se preguntaba el autor.

Luis García Montero (Granada, 1958) ha publicado, entre otros, los libros de poemas Habitaciones separadas (1994), por el que recibió el Premio Loewe y el Premio Nacional de Poesía, Vista cansada (2008), Un invierno propio (2011) y el ensayo Un velero Bergantín (2014). En 2003 recibió el Premio Nacional de la Crítica por La intimidad de la serpiente. Su obra se ha reunido en Poesía. 1980-2015 (Tusquets, 2015).

Visor publica estos nuevos poemas en prosa de García Montero en su colección Palabra de Honor, acompañados por unos dibujos de Juan Vida (Granada, 1955) que se acercan a las pinturas negras de Goya. Las miradas del pintor "le devuelven el rostro a un mundo anónimo, asumiendo que la realidad es carnal, solitaria e imperfecta".

[publicado en CORDÓPOLIS 19/4/2016]

   

Juan Bolea: "La base de mi novela es el enigma, la tensión por lo desconocido"

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Presenta 'El síndrome de Jerusalén', una novela negra sobre el fanatismo religioso llevado al final.

jurado-boleaEl novelista Juan Bolea inició ayer en la Feria del Libro de Córdoba la gira de presentación de su nueva obra, El síndrome de Jerusalén (Ediciones B). El acto, presentado por Francisco José Jurado, tuvo lugar a las 19.00 horas en el Bulevar del Libro.

El síndrome de Jerusalén , en palabras de su autor, "es una novela negra que trata un tema universal: el fanatismo religioso llevado a sus últimas consecuencias". En clave de investigación policial, la novela nos lleva de diferentes escenarios españoles hasta la ciudad de Jerusalén. Uno de los personajes tiene una vinculación muy estrecha con los fenómenos sobrenaturales del cristianismo, que lo convierte en sospechoso de una serie de crímenes. En fin, como resume Bolea: "El fondo es el misticismo llevado a extremos donde el bien y el mal se confunden".

A Juan Bolea (Cádiz, 1959, aunque vive en Zaragoza) le gustan las novelas de misterio. "La base de mi novelística es el enigma, la intriga, el misterio, la tensión que se genera por lo desconocido --asegura--. Aquí, con el tema de lo religioso y lo místico, encontré un filón. También en la época actual hay muchas personas que sienten lo religioso de una manera sobrenatural muy especial y eso abre una puerta inquietante que desde el punto de vista de la novela vale la pena cruzar". Asegura que es una novela de elaboración muy larga y que ha estudiado bien la historia de las religiones. Como novedad, introduce un detective tan simpático como falto de talento, Florián Falomir. Afortunadamente, ahí está su inspectora Martina de Santo para resolver el enigma.

Otro que presentó libro ayer fue Alejandro López Andrada, colaborador de este periódico. El nuevo libro de López Andrada, presentado por Carlos Clementson, Antonio de Egipto y Javier Ortega a las 20.00 horas en San Hipólito, se titula Entre zarzas y asfalto y ha sido editado por Berenice. Se trata de "una colección de estampas en prosa, muy madura", en la que su autor ha intentado "esencializar la mirada". Se trata de reflexiones, aforismos, relatos breves "que hablan de cosas de Córdoba y Los Pedroches con un lenguaje muy concentrado".

El ilustrador cordobés Raúlo Cáceres mantuvo un encuentro con miembros del club de lectura Central cómic, perteneciente a la Red Municipal de Bibliotecas, sobre su álbum La marcha zombi --editado por Panini--, que adapta al cómic la novela homónima de Max Brooks.

También se celebró una mesa redonda sobre Philip K. Dick y la distopía en Blade Runner , en el centro San Hipólito.

La jornada tuvo un gran protagonismo infantil con las intervenciones de Pedro Mañas y Estrella Borrego.

En cuanto a las firmas, los protagonistas de ayer fueron Alba López Paredes, que rubricó ejemplares de Nandidor y José Manuel Sánchez, autor de Jazz Café , novela ganadora del Premio Ciudad de Carmona.

[publicado en diario CÓRDOBA 19/4/2016]

 

La ciencia ficción, un género del presente

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Julián Díez y Fernando Ángel Moreno analizan 'Blade Runner' en una jornada que contó con la presencia de varios escritores de la escena local.

mesa-cienica-ficcion"Hay muy poca esperanza en la humanidad en la ciencia ficción". Lo afirmó ayer Fernando Ángel Moreno, profesor de la Universidad Complutense, en el encuentro que protagonizó con el ensayista y periodista Julián Díez en torno a Philip K. Dick y la distopía en 'Blade Runner' en el Centro San Hipólito. De la "crisis de la modernidad" y las guerras mundiales surge un estado de ánimo que impulsa la literatura distópica. En términos más amplios, apuntó Díez, la ciencia ficción tiene "hasta los años 80, quizá hasta la caída del Muro", un planteamiento épico "de avance y progreso" que ha perdido. Y en los últimos tiempos los autores más reivindicados del pasado siglo son los que establecen coordenadas más oscuras.

Un coloquio, moderado por la periodista Elena Lázaro, en el que Díez señaló que "casi ninguna de las mejores novelas de ciencia ficción ha sido adaptada al cine". "Es un género difícil, por sus desarrollos filosóficos y políticos", apuntó Moreno, que considera que "toda la ciencia ficción trata del presente", si bien se basa en códigos metaforizadores y de abstracción que no todos los lectores tienen voluntad de descifrar.

Con Blade Runner (en el futuro que propone la novela, recordó Díez, no llueve ni hay superpoblación ni influencias orientales, elementos que están muy presentes en la película de Ridley Scott) arrancó un debate en el que se habló desde Los Juegos del Hambre ("un producto eficaz" para Díez) hasta El Ministerio del Tiempo, una serie que en opinión del periodista "no ha tocado un temita que sea mínimanente delicado".

j-bolealopez-andradaLa tercera jornada de la feria tuvo también entre sus protagonistas a Juan Bolea y Alejandro López Andrada, que presentaron sus obras El síndrome de Jerusalén y Entre zarzas y asfalto, y Raúlo Cáceres, que se reunió con miembros de los clubes de lectura de la Red Municipal de Bibliotecas. J. Sánchez Vázquez firmó ejemplares de Jazz Café, novela con la que ganó el premio Ciudad de Carmona.

[publicado en EL DÍA de Córdoba 19/4/2016]

   

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